NUEVA LEY: TU HIJA ES UNA PUTA

Nueva ley: tu hija es una puta. Según el FBI, hay un nuevo tipo de prostitución: chicas de barrios bien venden sus culitos blancos en el centro comercial… para ganar dinero y gastarlo allí…

Seguro que ahora estás diciendo: ¿chicas adolescentes caucásicas de clase media alta haciendo la calle? Eso le pasa a las hijas de otros. Pero, ¿nuestra pequeña Ashley cambiando su chuchi por Gucci? ¡No!. Pues sí: tu hija es una puta. Tu hija es una puta. Me gusta decirlo.

Si te llega con las rodillas rozadas, puede ser que no sea por subir cuerdas. Y por favor, nadie se compra un BMW con “dinero ganado como canguro”. Y, ya, si el nombre de tu hija está en el directorio del centro comercial como “servicio” pues…

La broma, claro, se la han hecho a la América blanca, que siempre se sintió superior a los negros y, rápidamente, se piró a los suburbios. Los blancos temían que si criaban a sus hijos alrededor de negros, éstos convertirían a sus hijas en drogatas y putas. Ahora, gracias al milagro MTV, han salido así.

Los chiquillos blancos quieren una negraza con gran culo y las chicas blancas han aceptado que ser una puta es un modo de vida molón. Por eso, si lleváis a vuestra hija al centro comercial estas navidades y ella mete la cara en el regazo de Santa, deberíais mirarlo.
Y recordad a vuestra pequeña princesita, que si una mujer joven tiene que intercambiar sexo por bienes materiales, debe hacerlo de la forma aceptada: gracias al matrimonio.